sábado, 4 de abril de 2009

¡Es. Una. Auténtica. Hija. De. Puta!

Aunque servir yogur helado había sido mi trabajo más interesante hasta la fecha, mis amigos recién incorporados al mundo laboral me habían contado suficientes historias para saber que la vida de empresa no tenía nada que ver con eso. Ni mucho menos. Aquí faltaban las nauseabundas luces fluorescentes y las moquetas que disimulan las manchas. Donde hubiera debido ver secretarias desaliñadas había jovencitas de pómulos altos y trajes de diseño. Tampoco había rastro de material de oficina. La presencia de artículos tan básicos como archivadores, papeleras y libros era, sencillamente, nula. Observé cómo desaparecían seis plantas de blanca perfección antes de oír una voz cargada de odio.

-¡Es. Una. Auténtica. Hija. De. Puta! No la aguanto más. ¿Quién la aguanta, dime? ¿QUIÉN LA AGUANTA?-siseó una chica de veintitantos años ataviada con una flada de piel de serpiente y una diminuta camiseta sin mangas, más apropiada para una noche caliente en Lotus que un día (¡de invierno!) en la oficina.

-Lo sé, lo séee. ¿Qué crees que he estado sopotando yo los últimos seis meses? Una auténtica hija de puta. Y encima tiene un gusto pésimo-convino su amiga con una vigorosa sacudida de su adorable melena.

Afortunadamente llegué por fin a mi planta y las puertas del ascensor se abrieron. Interesante, pensé. Sin embargo, si comparas este posible entorno de trabajo con un día normal en la vida de una chica de instituto, podría ser más que eso. ¿Estimulante? Bueno, quizá no. ¿Acogedor, bonito, alentador? No; no exactamente.¿La clase de lugar que te anima a sonreír y a querer hacer un buen trabajo? ¡De acuerdo! En cualquier caso, si buscas lo delgado, lo sofisticado, lo último y lo supermoderno, Elias-Clark es la Meca.

Extracto del libro de El Diablo viste de Prada de Lauren Weisberger. Página 22-23. Editorial DEBOLSILLO

Conversación típica entre mujeres (pijas) neoyorquinas. En el fondo "belenes estébanes" yankees enlatadas en su estética "hipermegaultrasuperpijaoseanomemiresporquemedaaaaaa¡ahhh!". Qué asco. Ya se podrían meter su asquerosa y repelente pedantería y pijería (ergo idiotez) por el mimsmísimo coño, a ver si revientan (o se vuelven más inteligentes) y dejan en paz a este pobre "físico, o intento" con sus dilemas espacio-temporales e históricos, además de analizar las frases "rubianescas", en cuanto a las frases dichas en sé y per sé. ¡Hostia puta! He hablado.

Pd: Si alguien se ha sentido ofendido, que se joda. No tengo el día (noche) para lloriqueos. ¡Ea y Padam-Padam!

4 comentarios:

J. Guasch dijo...

jajaj ja deia jo que açò no era sa continuació de la teva història (quan he comensat a llegir me demanava, ¿ja existien yogurts en aquella època? ¿Empreses com ses d'avui dia?^^" al igual!)

Seeee, x desgràcia està ple d ninyates (i ninyatus, no els oblidem) així de decebents, però mira... som x ells tanta escòria q ells x noltrus^^" pau i amor! XD

x cert, bona s'imitacio d'en Rubianes jaja;)

fins prestttttt!

Ulises dijo...

hahaha doncs sí Joan, els idiotes consideren als idiotes com idiotes. Tots som idiotes, però al menys no som ninyatus! Gràcies per comparar-me amb un gran comediant com el Paco Rubiales. "Salutacions, by Jordi el dels Testigos"

Anónimo dijo...

Hijo, qué exageración, pus como veas la peli, con la petarda de la Anne Cara de Caballo Hathaway, sí que te pondrás de mal humor...

Madame

Ulises dijo...

Entonces no la veré. Paso de que me pongan un bozal. Salud